jueves, 30 de julio de 2009

Censo lingüístico


Jesús Royo en La Voz Libre.




Cuando se hace un censo, igual nos creemos que las preguntas son inocentes. No. Sobre todo, en el apartado referente a la lengua, detrás de las preguntas que se hacen hay todo un consenso político laborioso. Por parte del nacionalismo gloriosamente reinante, hay un auténtico oscurantismo militante. No quieren saber, no quieren que se sepa, no permiten que los ciudadanos declaren cuál es su lengua materna, la lengua que hablan en casa. En vez de esto, se pregunta “¿entiende el catalán?” Y claro, la gente contesta como si fuese un examen para aprobar. También debe haber quien lo entiende perfectamente y contesta que no para fastidiar.

En las hojas de matrícula escolar se pregunta “¿cuál es su lengua habitual?” Claro que, en el contexto de la escuela, declararse castellanohablante tiene un cierto grado de insumisión. Además, si toda la escuela es en catalán, es probable que el alumno castellanohablante considere que el catalán es su 'lengua habitual'. Entonces, la pregunta es ociosa... Sólo hay que imaginarse qué habría pasado si en la escuela franquista se hubiese hecho esta indagación: ¿cuántos catalanohablantes habrían declarado 'castellano' como 'lengua habitual'? ¿Y por qué?

En el impreso de matrícula de la 'Pompeu' (la Universidad Pompeu Fabra), se pregunta “cuál crees que debe ser la lengua docente: catalán/castellano/otras”. El detalle sutil está en el artículo 'la' y en que no aparece ninguna casilla para 'las dos'.

Puede parecer manicomial, pero es cierto. Yo mismo lo he visto en un congreso científico. Una personalidad de bastante prestigio académico razonaba que de ninguna manera se tenía que permitir que se preguntase a los ciudadanos sobre su lengua materna. Su explicación era muy 'pedagógica': eso sería como preguntar a un niño “¿a quién quieres más, a papá o a mamá?”. Sería cruel para el niño, porque se encuentra ante el dilema de escoger entre dos amores, inclinarse por uno de los dos, definirse. A lo mejor el ciudadano nunca había pensado que era castellanohablante. ¿Por qué tenemos que hacer que se defina, si eso le comporta una incomodidad o una pérdida de expectativas laborales o simplemente sentirse alejado de sus vecinos y amigos? Y sobre todo, el gran argumento era que, si se preguntase eso en un censo, nos estaríamos jugando todo el 'hecho nacional' a una carta...

Eso es intelectualmente perverso y políticamente denigrante. Los ciudadanos no somos niños, ¡por favor! Reivindiquemos un censo lingüístico. Y sobre números y mapas, que se presenten propuestas transparentes de gobierno. Y que se voten. Desdichado país, en el que hay que reivindicar las cosas evidentes.

miércoles, 29 de julio de 2009

Pasos necesarios


FERNANDO FERNÁNDEZ MÉNDEZ DE ANDÉS Rector de la Universidad Nebrija. Foro de la Sociedad Civil, en ABC



Hay que agradecer al nuevo ministro su oferta de un Pacto Nacional de Educación. Hay que suponer también que es compartida por el Presidente de Gobierno y que supone una renuncia implícita a su política de hacer de la educación espacio preferido de confrontación ideológica. Hay que confiar por último que este Pacto se entendiese con voluntad de permanencia, no como mera operación táctica o coyuntural, como una nueva foto para visualizar el activismo del ejecutivo. Un pacto que ha de nacer del acuerdo de los dos grandes partidos mayoritarios, que son los llamados a gobernarlo, y que estuviera abierto a los agentes sociales y profesionales de la educación, pero que no dependiera de ellos. Me van a perdonar mis colegas, pero somos en parte responsables -por omisión, complacencia o corporativismo- de los males actuales. Somos un ejemplo de la debilidad de la sociedad civil española.
Con estas premisas permítanme que vaya directamente al grano y sintetice el Pacto necesario en tres palabras, calidad, competencia y eficiencia. La calidad de un sistema educativo es muy difícil de medir, es una variable multidimensional que refleja las funciones de utilidad de los diversos colectivos afectados, stakeholders en terminología empresarial. Pero convengamos que hay indicadores internacionales, estudios de referencia en los que España compara muy mal. Convengamos también que no es principalmente un problema de gasto público porque de esos estudios no se deriva una correlación positiva entre gasto y calidad de la educación. Es cuestión de instituciones, incentivos y participación de la sociedad.
La calidad de un sistema depende crucialmente de los objetivos que le han sido asignados. Si, como es el caso en muchas partes de España, el sistema educativo se ha concebido, diseñado y financiado con el objetivo de contribuir decisivamente a la creación de nuevas naciones, no podemos luego quejarnos de que sus resultados en términos de cohesión territorial, conocimientos académicos o competitividad económica sean manifiestamente mejorables. Centrar el objetivo es pues una condición necesaria del pacto. Habrá que reconocer que la descentralización educativa plena no ha funcionado bien si se trata de formar ciudadanos españoles más educados, más libres y más competitivos. Recuperar algunas competencias básicas del Estado Central parece una consecuencia inevitable. Si ello requiere un cambio constitucional no habría que tenerle miedo, se ha planteado su reforma para temas mucho menores, pero me van a permitir una herejía de ignorante en leyes. Se me ocurre que si los doce hombres y mujeres justos del Tribunal Constitucional son capaces de dedicar cinco largos años de sus vidas a compatibilizar el Estatuto de Cataluña con los preceptos constitucionales, bien podrían dedicarle otro tanto a la educación.
Contenidos y proveedores son otros dos aspectos básicos de la calidad. Sobre los primeros se ha discutido desde los inicios de la Humanidad. Pero convengamos en que hoy el objeto de la educación no es tanto ofrecer conocimientos como enseñar a discernir, aprender a aprender. Vivimos en una sociedad donde la información es prácticamente gratuita y abundante, si uno la sabe buscar convenientemente. Demos pues a nuestros estudiantes las herramientas y los criterios para entender el mundo que les ha tocado vivir y para progresar en él. Despertemos en ellos el gusto por la lectura y el afán por la experimentación, expongámoslos a los clásicos y a los descubrimientos científicos más novedosos, pero sobre todo rompamos esa dicotomía mortal entre Ciencias y Letras. Siempre he tenido envidia de esos malditos ingleses que después de pasarse varios años leyendo a Virgilio y Aristóteles son capaces de estudiar Bioquímica o gestionar un banco. Eso es aprender y esa la versatilidad necesaria para la economía global.
Sobre proveedores de educación no deberíamos ya discutir. Deberíamos tener ya claro que el modelo único de enseñanza pública impuesto por la Revolución Francesa para hacer ciudadanos a golpe de instrucción obligatoria está obsoleto. Más cercana está incluso la Revolución Cultural y sus mil flores. Porque efectivamente la buena educación hoy requiere experimentar también con las formas tradicionales de proveerla, sin tabús ni cegueras ideológicas. Déjenme que les ponga dos ejemplos de esos prejuicios que impiden un debate constructivo, los uniformes escolares y la educación segregada por sexo.
Los primeros ha reaparecido en Estados Unidos de la mano de padres conscientes y preocupados del Bronx y de Harlem, que no son precisamente oasis de lujo, que entienden que la buena educación es una formación en valores y empieza por respetarse uno mismo y a los demás mediante lo que antaño llamábamos urbanidad. La segunda nunca ha desaparecido, quizás porque es la educación favorita de las élites intelectuales y progresistas de Nueva Inglaterra. No defiendo ninguno de los dos ejemplos. Pero tampoco los condeno. El punto es la libertad para que los ciudadanos elijan el modelo educativo que mejor satisface sus preferencias, la voluntad del Estado para respetarlos y la disposición a financiarlos sin exclusiones ni prejuicios. Y el compromiso de los padres con un modelo educativo en el que creen. Así han conseguido otros países mejorar significativamente los resultados académicos.
En España, por razones comprensibles, a la salida del franquismo optamos por un sistema educativo que es una mala copia del francés, mala por tardía y porque le falta el elemento unificador. Hora es ya de reconocer que se ha quedado obsoleta. Ha conseguido además alejar a los padres de la educación, porque se les veía como reaccionarios que impedían el cambio social. Hemos transferido la responsabilidad al Estado, de hecho a las Comunidades Autónomas, que invaden parcelas crecientes de libertad individual. Revertir esa tendencia porque ha fracasado en producir ciudadanos cultos y bien preparados es una componente necesaria del Pacto educativo. Confiar en los padres y devolverles la capacidad de elegir. Hacer competir a las instituciones educativas por atraer a los mejores alumnos, los mejores profesores, las mejores metodologías, deberían ser los principios inspiradores de este Pacto. Financiar a los estudiantes y no a las instituciones, subsidiar a los más necesitados y primar a los más brillantes, huir de la uniformidad, incentivar la aparición de gestores profesionales de centros educativos y asegurar que los propios centros se beneficien también de las mejoras en el rendimiento de sus alumnos. Todo ello son pasos necesarios y todos han de ir acompañados de un incremento sustancial en la transparencia en la gestión de fondos públicos para aumentar una eficiencia siempre conveniente y más en tiempos de crisis. Porque de lo que estamos hablado es de la necesidad de encontrar un nuevo espacio de colaboración entre la iniciativa privada y pública en la gestión de un servicio público como es la educación. Algunos, los más reaccionarios, lo llamarán privatización para matar toda posibilidad de discusión racional. Otros, entre los que estoy seguro estará el ministro Gabilondo, lo llamarán fomentar la pluralidad y la experimentación.

lunes, 27 de julio de 2009

viernes, 24 de julio de 2009

Germen nacionalista


Os dejo un trocito del discurso que brindó Miquel Roca, en la concentración del 11 de setiembre de 1976 en Sant Boi de Llobregat. Así nos luce el pelo.


Se´ns ha dit que tot això és un "nacionalismo de campanario". El qui ho deia despectivament no sabia, potser, que a nosaltres això no ens molesta. El nostre és un nacionalisme de campanar, sí, un nacionalisme que pujarà als campanars per tocar les campanes de la llibertat. Les campanes i les sirenes de les fàbriques, que reuniran tot un poble, ressorgit de les cendres de la persecució i de la repressió; al llarg de la história hem resistit, hem guanyat!
Però les campanes no es quedaran mortes en el seu tocar quan arribin als límits de Catalunya. Se sentiran més enllà, i les seves campanes, de les seves viles i ciutats, dels nostres germans del País Valencià i de les Illes, de Castella i d´Andalusia, del País Basc i de Galícia, d´Extremadura i d´Aragó, s´ajuntaran amb les nostres, perquè si Catalunya toca a llibertat, amics, és que a tot l´estat haurà arribat també l´hora de la llibertat.

jueves, 23 de julio de 2009

Multa lingüística




http://ciutadans-reus.blogspot.com/2009/07/multa-linguistica.html

Panes y peces


La opinión de Ángel de la Fuente en El Periódico de la Catalunya.


Fumata bianca. Tenemos Papa, digo, Acuerdo de financiación, con mayúsculas por supuesto. A juzgar por el alborozo de la prensa y de las fuerzas vivas locales, se trata de un acontecimiento de alcance cósmico, casi comparable a la inminente presidencia europea de ZP. El tema tiene su miga y prometo aburrirles con él a la vuelta de vacaciones. A modo de anticipo, aquí van algunas reflexiones rápidas sobre los 11.172,5 millones de euros que los heroicos negociadores autonómicos han conseguido arrancarle al Gobierno amigo, o no tanto.
Primero, estamos sin duda ante una reedición moderna del milagro de los panes y los peces. Mientras que el Gobierno central ha puesto sobre la mesa 11.172,5 millones, las ganancias que dicen esperar los gobiernos regionales suman bastante más. El nuestro, sin ir más lejos, confía en que el nuevo sistema le reportará unos ingresos adicionales de unos 4.000 millones en el 2012. Puede ser, pero el 2012 queda muy lejos. Para hacer proyecciones de este tipo es necesario hacer supuestos muy arriesgados, especialmente en las circunstancias actuales. Lo que sí se puede calcular sin demasiados problemas (y suma a 11.172,5) es cuánto ganaría cada uno en el 2009 con el nuevo sistema si se inyectasen de golpe en este año todos los recursos adicionales que ahora se anuncian. Nuestra parte de ese pastel asciende a 2.200 millones, más un pico adicional para que nos normalicen más y mejor.
Segundo, el Gobierno central proclama confiadamente que todos estos millones servirán para reducir el déficit de las administraciones públicas. Hombre, seguramente los déficits autonómicos sí, pero tendrá que ser a costa del déficit del Estado, ¿o no? Finalmente, me preocupa la liberalidad del Gobierno amigo porque confirma algo que nuestros avispados líderes regionales siempre han sospechado: que si uno está dispuesto a dar la tabarra que haga falta, Madrid terminará aflojando la mosca. Pero convendrán conmigo que la cosa tiene su peligro. Si basta con dar la tabarra para que te suelten varios cientos o miles de millones, ¿qué necesidad hay de subir impuestos, o de controlar el gasto? ¿Era esto la corresponsabilidad fiscal?

martes, 21 de julio de 2009

La diferencia entre ayudar a Catalunya o salvarla.

En el libro: "Roca, l´últim segon", encontramos una anécdota muy interesante ya que clarifica los diferentes tipos de nacionalista catalán.




Trias Fargas, sota aquella aparença d´aristòcrata anglés, era un foteta increible. I s´en fotia molt, de Roca i de Pujol. Quan es dirigia a Pujol sempre li deia: "El que tu diguis, líder, si ho diu el líder..."
Hi ha una anècdota il-lustrativa d´aquesta relació, datada el 1.977, Pujol i Trias, amb Josep Verde Aldea, estaven gravant en una emissora la falca de publicitat electoral del Pacte Democràtic per Catalunya. Trias va incloure en la seva intervenció la frase "...i tots viureu millor". Pujol i Verde li van fer notar que hauria d´haver dit viurem, i no el pejoratiu viureu. Però per fer aquella modificació Trias havia de repetir la seva intervenció sencera, i com que eren les tres de la tarda, s´hi va negar.
-N´estic fart. Marxo-va dir.
-Jo bé em quedo, i aixó que avui és el meu aniversari de casament -li va replicar Pujol.
-Tu vols salavar Catalunya, i per tant t´has de quedar. Jo, com que només vull ajudar-la, marxo.
I se´n va anar.

El castellano en Cataluña


La carta de un lector de El País:


Muy a mi pesar, como catalanista y de izquierdas, tengo que reconocer que, en Cataluña, el uso del castellano está restringido, no existe la posibilidad de expresarse o recibir información en los dos idiomas oficiales. Como ejemplo puedo indicar que mi madre, persona que habla y piensa en castellano, que además es de avanzada edad y está más bien regular de salud, cada vez que recibe una notificación de su médico, que por desgracia son muchas, tengo que traducírsela al castellano, porque únicamente está escrita en catalán. Esta situación me parece muy pobre, y desde luego no me sirve que algún político me diga que puedo exigir que la Administración se dirija en el idioma que conoce o que tiene a su disposición escuelas de adultos para aprender catalán. Es decir, el uso y entendimiento del catalán es obligatorio y no un derecho para todo el mundo en Cataluña, ésta es una situación lamentable y que restringe los derechos constitucionales de las personas, y desde mi punto de vista hace más pequeño a un país.


DAMIÁN BARRANCO GÓMEZ - Terrassa, Barcelona

domingo, 19 de julio de 2009

Manipulación nacionalista


En el libro: "Roca, l´últim segon", Andreu Farràs y Toni Soler, explican un ejemplo de manipulación nacionalista a través de los medios:

"El cas més sonat va ser al principi de 1995. Els informatius del canal català cobrien la informació de la cavalcada de Reis a barcelona. Davant la manca d´equips disponibles, es van contractar a corre-cuita els serveis d´una productora privada perquè subministrés les imprescindibles imatges del candidat Roca, amb la néta al coll, mirant la cavalcada com un ciutadà més. Aquest fet va motivar la indignació de l´oposició i també la dels profesionals de TV3·".

miércoles, 15 de julio de 2009

Pedir dinero es muy fácil; gastarlo, aún más‏


Martí Saballs en Expansión.


Prólogo. Ayer, el gobierno de Cataluña aprobó el nuevo modelo de financiación y otros interesantes acuerdos. Entre ellos: subvencionar a la UAB (Universitat Autònoma de Barcelona) con 450.000 euros para desarrollar el programa de escuela de cultura de la Paz; subvencionar con 530.000 euros a la Agencia de las Naciones Unidas para la ayuda de los refugiados palestinos y destinar un millón de euros a contratar monitores para los jardines de infancia propiedad de la Generalitat, que bien podrían utilizarse para facilitar la creación de guarderías privadas.

La semana pasada, por ejemplo, el departamento de Medio Ambiente y Vivienda catalán adjudicó 24.879 euros a la UAB para investigar la diversidad genética de los lobos y osos catalanes. No quiero engañar. También se aprobaron ayer proyectos nada discutibles: desde la construcción de nuevos centros de asistencia médica en zonas rurales hasta programas para la mejora del suministro de agua potable.
Primer capítulo. “Hemos plantado cara al Estado y hemos ganado.” Las dos oraciones, unidas por la conjunción copulativa “y” las pronunció Joan Puigcercós para mostrar su euforia tras el nuevo modelo de financiación. ¿A qué se refiere el presidente de ERC? La primera persona del plural “hemos” puede tratarse del partido que preside, miembro del tripartito, que obtuvo un 5,59% de los votos (298.139) del total del censo electoral (5.324.909) de Cataluña en las últimas elecciones generales.
Puede referirse al gobierno tripartito o incluso al conjunto de los catalanes, lo cual no debe satisfacer mucho a CiU y PP, que no apoyan el nuevo modelo por distintas razones. “Plantar cara” es una expresión dura, muy machote, que apela a enfrentamiento más que a negociación. Ellos y nosotros, el patético drama eterno. “Estado”, pero ¿qué es el Estado sino todos? Desde la administración central a la autonómica y la local. Es una pena seguir buscando enemigos con estos lenguajes tan guerreros para satisfacer a las parroquias: ya sean antiespañolas o anticatalanas. Qué difícil es buscar la concordia. “Hemos ganado” cierra Puigcercós con un final tremendo. ¿Se supone entonces que el “Estado” -o sea, todos- hemos perdido? Qué triste.
Segundo capítulo. Hasta que no salgan los detalles del reparto final de los 11.000 millones de euros y se especifique cómo se pagarán, hay que dejar un cierto margen al escepticismo. El modelo requería mejoras en aras de la eficiencia en la gestión de los recursos, para responder al cambio demográfico y para lograr mayor justicia fiscal. A nadie le gusta recibir menos de lo que paga, sobre todo durante un largo periodo de tiempo.
No puede confundirse la solidaridad con la subsidiariedad, pero no puede arreglarse un problema con otro. Los desajustes con la antigua financiación que padecían Cataluña, Baleares, Valencia y Madrid no pueden arreglarse con una solución que no beneficie a todos. No sólo a los catalanes, sino al resto, y saberlo contar. El buen gobierno es aquél que en los temas que afectan a todos los ciudadanos decide pensando más allá de las siglas políticas y las estrategias territoriales. ¿Competencia entre comunidades? Siempre, pero una vez garantizados los servicios mínimos y ofreciendo cierto margen en políticas fiscales: para subir y, también, para bajar impuestos si quiere atraerse talento y capital.
Tercer capítulo. ¿Suponemos que hipotecamos el futuro en medio de la peor crisis de los últimos cincuenta años? ¿Quién pagará la fiesta? El flujo de dinero destinado a las autonomías no provendrá de un ahorro o mejor gestión de los recursos del gobierno central. La espiral deficitaria del Estado (recuerdo que somos todos, hasta el señor Puigcercós) no para de crecer y, con ella, la deuda, que podría agravar el valor en el mercado internacional de la palabra España.
¿Qué más queda? Más impuestos a corto y largo plazo. La Generalitat ya se frota las manos gracias a la nueva capacidad normativa. Restarán capacidad consumidora e inversora a los ciudadanos y a las empresas, que verán como el dinero que ganan también ayudará a financiar más investigación de osos, lobos y escuelas abstractas a favor de la paz mundial.

Las asociaciones por el bilingüismo piden al Defensor del Pueblo que recurra la LEC


http://www.libertaddigital.com/sociedad/las-asociaciones-por-el-bilinguismo-piden-al-defensor-del-pueblo-que-recurra-la-lec-1276365013/

lunes, 13 de julio de 2009

Little Gidding


"Nunca cesaremos de buscar y, sin embargo,la meta de todas nuestras búsquedas será retornar al punto de partida y conocer ese lugar por primera vez."


T.S. Eliot, Little Gidding.

domingo, 12 de julio de 2009

¿Quién tiene la bandera más grande?

¿Quién tiene la bandera más grande?



¿Quién muestra gozoso su bandera gigante?, ¿Quién es el facha?

sábado, 11 de julio de 2009

El Quijote


...Y que es el Quijote que va a leerme mi madre en voz alta, y en el que va a enseñarme a mí a leer con el apremio de quien cree en la cultura como medio de progreso y prosperidad. Lee los capítulos del Quijote con voz de mujer de pueblo, y también con voz de niña que ha ido a la escuela republicana, y que luego se la han quitado. Mi madre lee el Quijote con la voz de los personajes del Quijote, que es la voz de la gente que conversa con quien le sale al paso en un camino o en un trayecto de autobús, y lo lee también con voz ligera de molino de viento, y con voz pausada de mula de manta, y con voz de queso y carne magra de quien ha pasado mucha hambre de pan, queso y carne, y asimismo con la voz llena de las claras ondas del viento del pueblo que avanza peinando lomas y barrancos...


"Los príncipes valientes"
Javier Pérez Andújar

jueves, 9 de julio de 2009

Para vivir en Catalunya...



Hay que acostumbrarse a tragar.

miércoles, 8 de julio de 2009

La vida es por naturaleza finita.


La vida es por naturaleza finita, por eso nos tenemos que cepillar al nacionalismo lo antes posible. Nos merecemos envejecer en una Catalunya libre.

domingo, 5 de julio de 2009

Vacaciones en Barcelona.


Vacaciones de verano y crisis. Quedarse en Barcelona no significa aburrirse. Recuperar amigos o rascarse el ombligo...actividades que no cuestan dinero y dan gran placer.

Salam al català.



La Plataforma per la llengua y El Consell Islàmic Cultural de Catalunya han editado "Salam al català", un librito que explica algunos aspectos de la lengua catalana para acercarla a los que tienen el árabe como lengua.
Yo me pongo en la piel de un joven que viene desde Rabat hasta España, que viene a parar a Barcelona por pura chiripa, que hay muchas posibilidades de que mañana se tenga que ir a Zaragoza o a Albacete. Me parece a mí que este chaval lo que querrá aprender inmediatamente es el castellano y luego si definitivamente se instala en Catalunya, le interesará para abrirse más puertas, aprender catalán.

jueves, 2 de julio de 2009